Desde hace unos años, el miedo a consumir grasa en la dieta ha ido desapareciendo. Esto se debe a que ya somos conscientes de la necesidad de aportar a nuestro organismo las llamadas «grasas saludables», necesarias para un correcto metabolismo. Lo mejor es entender su funcionamiento para conocer cuáles son las grasas buenas.
¿PARA QUÉ SIRVEN LAS GRASAS?
Los lípidos (nombre de las grasas) tienen una función energética para nuestro cuerpo. Es básicamente nuestro depósito energético. También ayudan a formar partes de las células del cuepro y forman parte de nuestro metabolismo.
El tejido graso mantiene el calor interno y nos da resistencia a los impactos. Además, como hemos dicho, es nuestro almacén de energía a largo plazo. Pero hay que tener en cuenta que no debemos acumular demasiada grasa en nuestros «depósitos»; pues esto derivará en sobrepeso y obesidad.
NO PODEMOS VIVIR SIN GRASA
Hay que tener claro que las grasas son imprescindibles para que funcione el cuerpo y para la formación celular. Si dejamos de consumir grasas aparecerán problemas metabólicos y hormonales.

GRASAS BUENAS VS GRASAS MALAS
Las grasas se dividen principalmente en 2 grupos: saturadas e insaturadas. Estas últimas son las grasas buenas, que incluyen ácidos grasos polinsaturados y grasas monoinsaturadas. Estas son las grasas que te ayudarán a reducir el colesterol y el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Se encuentran en el pescado graso, la linaza, las nueces, etc. que contienen ácido graso Omega-3. Las grasas monoinsaturaas son ricas en vitamina E (antioxidantes) y las encontramos en el aceite de oliva, aguacates, semillas crudas, etc.
Las grasas que hay que evitar son las grasas trans y las saturadas, usadas en la comida rápida, pastelería, etc. son las que aumentan los niveles de colesterol y los riesgos de enfermedades cardiovasculares.

BENEFICIOS DE TOMAR GRASAS
Las grasas saludables son parte importante de cualquier dieta saludable, ya sea para perder peso o ganarlo. Especialmente importante es su consumo cuando tenemos un déficit calórico. Las grasas buenas proporcionan ácidos grasos que ayudan a administrar vitaminas solubles en agua y a mantener las hormonas sanas. El mayor beneficio de introducir grasa en la dieta lo obtenemos en la salud de nuestro corazón, además reducimos los triglicéridos y elevan el «colesterol bueno». Las grasas saludables ayudan a reducir la inflamación celular, minimizan el riesgo de enfermedades, reducen la presión arterial y ayudan a luchar contra la obesidad.
Por último, los ácidos grasos Omega-3 parecen tener un impacto positivo en nuestra salud mental y mejoran nuestro estado de ánimo.

0 comentarios